BasidiomycotaClase AgaricomycetesOrden Agaricales

Lepiota perplexa

Knudsen

Lepiota perplexa

Lepiota perplexa ERD-7190. Fresnedo, Cueva Huerta (Teverga), 30-IX-2017, Corylus avellana. Foto: Enrique Rubio

       Esta Lepiota, que encontró Pedro Zapico bajo avellanos, en suelo calcáreo, tiene sombreros de hasta 60 mm de diámetro y estípites de hasta 10 mm de anchura. Su porte es, pues, de tamaño medio-grande. Los abundantes restos piramidales del velo sobre el sombrero y pie, hacen que, para algunos, se encuadre en un género diferente: Echinoderma y no en Lepiota.
Lepiota perplexa carece del anillo persitente de Lepiota aspera y posee queilocistidios abundantes y polimorfos. Las esporas son dextrinoides y metacromáticas en azul de cresilo (abajo, a la derecha, tras practicar el inflado de la espora con amoníaco y ácido acético, para favorecer la coloración de la endospora.
Lepiota calcicola, también censada en Asturias, es una especie similar, pero las escamas velares de su estípite son mas persitentes y sus esporas, no metacromáticas, no poseen la depresión suprahiliar típica (aspecto de pingüino) de las de Lepiota perplexa.
Lepiota perplexa

Lepiota perplexa Micrografía. ERD-7190. Fresnedo, Cueva Huerta (Teverga), 30-IX-2017, Corylus avellana. Foto: Enrique Rubio

Lepiota perplexa

Lepiota perplexa Esporas x 1000. ERD-7190. Fresnedo, Cueva Huerta (Teverga), 30-IX-2017, Corylus avellana. Foto: Enrique Rubio

Lepiota perplexa. Coto de la Buena Madre (Somiedo-Asturias), 12-IX-2020, Fagus sylvatica. Foto Pedro Zapico

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